26 junio 2006

Microsoft colabora con Creative Commons

Creative Commons convenció a Microsoft para que éste último se sensibilice del movimiento de contenidos abiertos. Así, ya puedes descargarte un add-in con el que podrás aplicar directamente modelos Creative Commons a todos tus documentos Microsoft Office.

El procedimiento es bien sencillo:

1/ Accedes a la página de Microsoft donde se encuentra el add-in Creative Commons para Office.
2/ Descargas el programa de istalación a tu PC.
3/ Ejecutas el programa de instalación: ccsetup.exe (siempre que dispongas de un Office XP u Office 2003).

El add-in te permite embeber un modelo CC dentro de un documento. Descarga la licencia que hayas designado para tu contenido y la inserta directamente dentro del mismo. Accede a esta página para saber qué es Creative Commons.


19 junio 2006

Bookblog: el libro del futuro no es líquido, ni sólido, ni gaseoso

Como herramienta vehicular de la información en la que se ha convertido el weblog, ya deberían existir blogs cuyo orden no sólo lo marcara el servidor (orden descendente). ¿De qué manera se extendería la aplicación social de los blogs si pudiéramos escoger el orden de los post? Es decir, si a un blog se le pudiera dar el mismo orden que una novela o una tesis (orden ascendente), o si se le pudiera dar un orden aleatorio (orden folksonómico): bien donde los post estuvieran ordenados según la recurrencia de tags (vg: del.icio.us), bien por la importancia que dan sus lectores (v.g: Digg, Menéame).

Bob Stein, uno de los llamados digerati (intelectuales digitales) nos ofrece su visión del libro del futuro en su Institute for the Future of the Book. En resumen, defiende que el futuro del libro no se encuentra tanto en la línea de la masiva digitalización (su idea es neutralizante de los planes de Google y de Quaero). Para Stein, contrario a la idea del liquid book, los libros del futuro requieren HTML. ¿Por qué? La mejor manera de entenderlo es ver un bookblog y dejar de hablar de él, como el que dispone en su instituto: Gamer Theory, de McKenzie Wark.

¿Cómo sería un libro que es un blog o un blog que es un libro?

La idea de Stein me ha parecido magnífica para ciertas aplicaciones, sobre todo las relacionadas con la investigación y la docencia. He imaginado cómo será el futuro de libro si ideas como ésta se ponen en marcha: mire el ejemplo e imagine cómo serán las tesis doctorales del futuro, y cómo cambiará la lectura de éstas, la manera de acceder a ellas en los buscadores, la manera de involucrar al resto de la comundad científica; qué significarán conceptos como intertextualidad o metatextualidad, y cómo variará el concepto de propiedad intelectual...

15 junio 2006

Colaboraciones más allá del espacio y del tiempo

Es habitual encontrarnos con gente que pone cara de extrañeza cuando le hablas de Creative Commons. Casi siempre se debe a falta de información o a la inquietud que todo movimiento levanta cuando demasiada gente habla de él y nosotros no tenemos una opinión formada.

Cada día observamos que distintos proyectos se suman a la idea de colaborar. Nosotros deseamos que te formes una opinión (buena o mala) y para ello hemos elegido una presentación en Flash hecha por Creative Commons y publicada en el web de la Harvard Law School. En la presentación, al estilo de explodingdog.com, se explica muy bien en qué consiste el movimiento.

Accede a la presentación de Creative Commons y ofrécenos libremente tu opinión.

09 junio 2006

The Guardian: entrevista con Lawrence Lessig

Demasiadas cosas apuntan a que Internet sea el vivero de los futuros cambios sobre la propiedad intelectual, la difusión democrática del conocimiento y, en fin, el desarrollo de nuestras sociedades. En el primer sentido, una de las fuerzas fundamentales es el norteamericano Lawrence Lessig, quien, antes de apresurarse a volver a pleitear por la regulación del copyright en los Estados Unidos, ha aprendido que es necesario tener a un buen número de gente de su lado.

La entrevista con The Guardian, aun siendo breve y sin detenerse demasiado en la iniciativa fundamental que preside Lawrence Lessig (Creative Commons), trata de plasmar la importancia social que ha ido adquiriendo en estos últimos años el movimiento antirestrictivo del copyright, comenta la futurible adaptación de las leyes, del lugar de florecimiento de este movimiento: el mundo digital; y nos revela casi sin querer un retrato robot de los seguidores de la idea del copyleft en contenidos: éstos son creadores individuales pero preocupados por el colectivo, una nueva clase basada en la colaboracion en su sentido etimológico, cuya máxima expresión está siendo Internet.

Freedom fighter with a guilty conscience, Glyn Moody.
Entrevista de The Guardian con Lawrence Lessig
(Resumen)

Comienza el redactor dándonos cuenta del origen de la dedicación de Lessig. Éste se licenció en derecho por la Universidad de Pennsylvania y se marchó a estudiar el constitucionalismo de los países del Este de Europa y la extinta URSS a mediados de los ochenta, mientras estudiaba filosofía en el Trinity College de Cambridge. En cuanto se dedicó al ciberespacio hizo una analogía entre el constitucionalismo de Este/Oeste y el derecho en mundo real/digital. Y cayó en la cuenta de que ciertas leyes dejaban de tener sentido si trataban de aplicarse al mundo digital por una total descontextualización. Así, en su primer libro, Code and Other Laws of Cyberspace, lanzó la primera idea fundamental: la descontextualización de las leyes tradicionales en la "arquitectura" (el código informático) de Internet.

Al mismo tiempo, Lessig sentía la llamada de su conciencia porque, según afirma en la entrevista, la mayoría de los grandes abogados trabajaban en la maximización del copyright, es decir, en la idea de prorrogar el copyright eternamante, lo que se ha conceptualizado como copyright forever
. Se hace necesario comentar que en EE. UU se ha ido extendiendo el periodo de protección de las obras 11 veces en los últimos 40 años (de 25 a 70 años de protección), igualándose a Europa. Lessig se decidió por defender el lado contrario y "tratar de equilibrar así las fuerzas", menciona Lessig. La pretensión es reducir el periodo de protección a 14 años. Finalmente, la entrevista menciona la analogía entre Creative Commons con el proyecto de Richard Stallman, Software Libre.


Creative Commons
Recordemos que Creative Commons es una asociación sin ánimo de lucro que nació en 2001 y que ya se extiende en casi en una treintenta de países. Esta asociación facilita 'plantillas' de permiso de copyright para los que tengan algún contenido artístico o científico publicado en Internet y deseen compartirlo. Estos modelos se caracterizan porque el autor permite con ellos la copia y distribución bajo la condición de que se le cite, del mismo modo que ofrece otros permisos, como la modificación y comercialización. Todo bajo el epígrafe (contrario a la típica fórmula "Todos los derechos reservados") "Algunos derechos reservados", o, en sentido positivo,"Algunos derechos permitidos". Aquí tienes más información sobre cómo aplicar licencias Creative Commons.

El trasfondo del movimiento Creative Commons es la sostenibilidad del desarrollo de la investigación. Entendemos que Lessig ha llegado a la conclusión de que el colectivo que ha de pagar sumas importantes por uso de obras con copyright es el mismo que crea obras con copyright, por lo que la solución es que si nadie protege sus obras con un modelo copyright, sino con un modelo Creative Commons (gratuito y de libre acceso), la difusión de conocimiento será progresivamente mayor, y los costos progresivamente menores.


El valor de la entrevista con Lessig
La iniciativa de The Guardian de la publicación de una entrevista con Lessig es interesante en tanto que cualquier medio de comunicación se siente profundamente sensibilizado con los aspectos críticos de la industria de la comunicaciónen frente a Internet: la producción, el trato y el mercado de propiedad intelectual. Sobre todo teniendo en cuenta las acciones en contra de medios de Internet como Google, a quien la Organización Mundial de la Prensa pretende exigirle que pague derechos por transcribir noticias de sus afiliados (véase al respecto la idea de descontextualización de la ley de Lessig que se cita arriba).

Puedes consultar en este mismo blog una entrevista con el conductor de Creative Commons en nuestro país, Ignasi Labastida. Te aconsejamos enfervorizadamente además, que veas la presentación de Lessig sobre Free Culture: no tiene desperdicio, además de ser entretenida.

07 junio 2006

Firefox detecta sitios con licencia Creative Commons

Si utilizas Mozilla Firefox (y si no es así, aprovechamos para aconsejarte que lo hagas), te aconsejamos que utilices el plugin que Mozilla ha puesto a disposición de sus usuarios. Este plugin detecta si la página que visitas contiene una licencia tipo Creative Commons, y qué condiciones de uso ofrece ésta.

Para obtener ese plugin, pulsa en Herramientas_Extensiones_Obtener más extensiones o acude a la página Add-ons de Mozilla y en la ventana de búsqueda escribe 'mozCC'. Aparecerá esta página:

Pulsa para ampliar

Instala el plugin y reinicia Firefox. Cuando te encuentres con una página que ofrece licencia Creative Commons, verás unos símbolos en el extremo inferior derecho:

Pulsa para ampliar


Los símbolos son las condiciones de copyright que poseen los contenidos de esa página. Si pulsas sobre alguno de ellos aparecerá la siguiente ventana:

Pulsa para ampliar

En ella se ofrecen las condiciones de copia, distribución, modificación y uso comercial de los contenidos de la página. En este caso, las condiciones expresadas son:

Símbolo de que se permiten derechos bajo el modelo Creative Commons.

Símbolo de que se ha de citar al autor de la obra si se utiliza ésta.

Símbolo de que se ha de ofrecer los mismos derechos a terceros.

Símbolo de que no se permite uso comercial de la obra.



Un grupo editorial francés denuncia a Google

Poniendo del revés la frase, la editorial La Martinière hizo suyo que el mejor ataque es una buena defensa y presentó denuncia por ataque al derecho de propiedad intelectual contra Google ante el Tribunal de la Gran Instancia de París.

El motivo de la denuncia es que Google 'tiene la intención' de digitalizar millones de libros para disponerlos en Internet (Google Book Share). ¿Qué hay de coincidencia en que la editorial y la propuesta de un buscador europeo (Quaero) provengan del mismo país? No sabemos si es realmente sincera la declaración del grupo editorial de que su objetivo es la protección de los fondos editoriales de sus empresas Le Seuil, (Francia), Delachaux et Niestlé (Suiza) y Abrams (EE. UU.). El origen de la denuncia es que Google ha digitalizado sin autorización extractos de cientos de libros de esta editorial que residen en la Biblioteca de Michigan.

Hace unos días leí que el monopolio sobre la patente del cinetoscopio en la Silent Era provocó que algunos productores miraran Hollywood como solución no solo por su clima y la diversidad de sus parajes, sino por su cercanía con la frontera Mexicana, ya que eran perseguidos por agentes federales y tenían que recoger de tanto en tanto sus bártulos y huir.

Es curioso que la mayor expansión norteamericana se haya producido a través de una industria que nació de la infracción de una patente. Las especias, el caucho, el cine... ¿Le toca a Internet?